Quinta da Casa Branca

Nuestras reseñas

La Quinta da Casa Branca está discretamente situada justo encima del centro de Funchal, a 15 minutos a pie del puerto, restaurantes y tiendas. Es un oasis de calma y tranquilidad alejado del bullicio de la ciudad, con vistas al mar visibles a través del arboreto y la plantación de plátanos que envuelven los cuidados y botánicamente interesantes jardines. La parte principal del hotel es contemporánea, de baja altura, de vidrio, acero y pizarra negra que se mezclan armoniosamente en el jardín y contrastan directamente con la casa solariega tradicional e imponente. Las Garden Rooms son súper cómodas, simples con grandes camas king size, finas sábanas de Madeira y baños de mármol sólido. Las Premium Rooms son iguales pero más grandes y las suites de la Casa Solariega, en contraste, son individuales y grandiosas. Todas las habitaciones tienen una terraza privada, algunas abren al exuberante jardín. Un clima templado cálido proporciona las condiciones perfectas para cultivar plantas exóticas de todo el mundo y a lo largo de los años, los jardineros de Casa Branca se han superado con más de 250 especies para identificar. Generosamente, el hotel proporciona un plan detallado para ayudar, pero puedes pasar muchas horas felices paseando, oliendo, tocando y debatiendo qué es qué: ¿es el Limpiatubos Limón o el Limpiatubos Llorón, el Hibisco Chino o la Rosa de Sharon? Quizás cansado de este deporte, retírate a una de las dos piscinas, el bar Quinta da Casa o el restaurante Garden Pavilion. Guarda el restaurante de comedor formal para la noche y siéntate en el magnífico comedor o en la terraza disfrutando de una cocina inventiva y contemporánea. Ven a la Quinta da Casa Branca para relajarte, descansar y rejuvenecer: 5 estrellas sin pretensiones.

Hugh Graham-Watson