Ubicado en el corazón verde de Borgoña, el pintoresco pueblo de Cluny alberga uno de los sitios religiosos más importantes de Francia: la Abadía de Cluny. Popular entre los aficionados al arte y la historia, el pueblo ofrece desde casas de huéspedes discretas hasta impresionantes villas con cocina propia y hoteles elegantes. Los mejores lugares para hospedarse en Cluny están justo en el centro del pueblo, perfectos para exploraciones a pie.
Fundada en 910 por Guillermo I, Duque de Aquitania, Cluny fue el sitio de una imponente Abadía Benedictina, hogar de la orden monástica más poderosa de Europa hasta la consagración de San Pedro en Roma en 1506. Los visitantes modernos pueden descubrir las ruinas de la Basílica de San Pedro y San Pablo, y admirar los antiguos claustros de la Abadía, murales y tallas intrincadas. Visita el Museo de Arqueología y Arte, o dirígete más lejos al Castillo de Cormatin, la Fortaleza de Berzé y la encantadora Mâcon. Hay muchas visitas a viñedos y degustaciones en la región.
Otra fama de Cluny es su papel como parte del Haras Nacional, el centro nacional de Francia para la cría y entrenamiento de caballos. Originalmente una granja de cría establecida por Napoleón en 1807, el centro ahora ofrece visitas guiadas, ¡ideal para los amantes de los caballos de todas las edades!
Explora tiendas independientes peculiares, recorre el mercado del sábado y saborea una copa de vino en un bar relajado mientras estás en el pueblo. Ya sea que estés aquí por el vino o la arquitectura antigua, los mejores lugares para hospedarse en Cluny son lugares íntimos, que prometen una cálida hospitalidad y mucho carácter.
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Cluny (Cluny)
Una acogedora y cálida casa de huéspedes familiar en Cluny. Las cuatro habitaciones de huéspedes son espaciosas, con suelos de madera y baños privados. La habitación cuatro tiene un balcón con vistas al exuberante jardín con una piscina al aire libre de temporada. Una variedad de excelentes restaurantes se encuentran a poca distancia a pie.
Cluny (Cluny)
Esta encantadora antigua fábrica de cerámica ofrece un ambiente acogedor con un comedor cómodo y una cálida terraza de jardín durante los meses de verano. Las habitaciones son originales y contemporáneas, mientras que el salón ocasionalmente alberga exposiciones de arte. El restaurante sirve auténtica cocina regional.
