A menos de 30 kilómetros de la costa, la histórica ciudad de Guingamp es un destino encantador para unas vacaciones bretonas relajadas, con fácil acceso a una gran cantidad de atracciones culturales y al aire libre. Las opciones de alojamiento van desde acogedoras cabañas hasta íntimos hoteles con encanto, y nuestra selección de los mejores lugares para hospedarse en Guingamp incluye una encantadora residencia del siglo XVIII, elegida por su cálida bienvenida y excelente ubicación.
Para conocer la fascinante historia de Bretaña, admire la Basílica de Notre-Dame-de-Bon-Secours del siglo XI, los restos del Castillo de Pierre II y el impresionante ayuntamiento. Los jardines públicos son un lugar maravilloso para pasear. La vida se centra en la adecuadamente nombrada Place du Centre, donde se pueden ver casas con entramado de madera y la impresionante Fontaine de la Plomée. Elija una mesa en un café acogedor para disfrutar de un café y observar a la gente.
Más allá, encontrará oportunidades para ciclismo, senderismo y equitación en el campo. En la famosa Costa de Granito Rosa, las ciudades de Plougrescant, Perros-Guirec y Roscoff merecen la pena ser visitadas por los deportes acuáticos, la observación de aves en el Archipiélago de las Siete Islas, caminatas costeras y mariscos de primera calidad. Regrese a uno de los mejores lugares para hospedarse en Guingamp para relajarse y recargar energías antes de otro día de aventura.
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Guingamp
Esta casa señorial del siglo XVIII conserva la elegancia y el encanto del pasado, junto con todas las comodidades modernas de hoy. Las habitaciones y suites están decoradas de manera individual y con estilo, las mejores cuentan con terraza privada. No hay restaurante, pero hay muchos cerca. Una excelente base para una estadía corta en esta encantadora ciudad provincial.
