Un tranquilo pueblo de piedra arenisca cerca de la punta norte de Mallorca, Pollença tiene un brillo mágico al atardecer. Es un destino maravillosamente relajado para aquellos que buscan sumergirse en la fascinante historia de la isla y descubrir sus maravillas naturales a través de excursiones a pie o en bicicleta. Una pequeña selección de excelentes opciones de alojamiento te espera, adecuada para una variedad de gustos y presupuestos. Ya sea que busques una sencilla casa de huéspedes o un lujoso monasterio convertido en hotel, nuestra lista de los mejores lugares para hospedarte en Pollença lo tiene todo.
Comienza tus exploraciones en la Plaça Major, la impresionante plaza de piedra arenisca del pueblo. Entra en la imponente iglesia, con su distintiva ventana de rosa, siéntate en una terraza de café para tomar un café o llena tus bolsas con productos frescos en el bullicioso mercado de los domingos. Los entusiastas culturales disfrutarán visitando el Museo de Pollença, el Museo Dionis Bennassar o asistiendo a un espectáculo en la Sala61.
Sube al Puig de Maria, sigue los 365 Escalones del Calvario y admira las magníficas panorámicas desde el Puig de Pollença. El Faro de Formentor es otro emblemático punto de referencia local. Para un día junto al mar, aventúrate al cercano Port de Pollença. Los amantes de las actividades al aire libre también encontrarán rutas de senderismo, ciclismo de montaña y equitación en las colinas circundantes. Vale la pena recordar que los mejores lugares para hospedarte en Pollença se llenan rápidamente durante julio y agosto, ¡así que reserva tu viaje con mucha anticipación!
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Pollença (Mallorca)
Un elegante hotel en el casco antiguo de Pollensa. Las habitaciones románticas están decoradas en tonos cálidos y neutros, con suelos de madera y obras de arte locales. Algunas cuentan con elegantes balcones o terrazas, además de una piscina en la azotea con fabulosas vistas a la montaña. La ubicación en la plaza del pueblo lo convierte en una opción perfecta para explorar fácilmente.
Pollença
Una mansión del siglo XVII convertida en un hotel boutique solo para adultos en el centro de Pollenca. Interiores bellamente diseñados que combinan sin esfuerzo características tradicionales y de época con toques modernos elegantes y mucho arte contemporáneo. Además, hay una zona de bienestar, piscina exterior y terraza, y un restaurante de tapas.
Pollença (Mallorca)
Finca tradicional convertida en villa de vacaciones para 8 personas, a las afueras de Pollença. Casa de campo clásica por fuera, los interiores irradian un estilo minimalista con tonos blancos contrastando con vigas de madera rústica y mobiliario moderno. Instalaciones excepcionales incluyen una gran piscina y una pista de tenis privada en el lugar.
