“Un hotel de lujo frente al mar en Vero Beach. Las habitaciones espaciosas y contemporáneas cuentan con muebles de teca personalizados, amplios balcones con vistas a la playa o a la piscina, y duchas ovaladas. Disfruta de deliciosos mariscos, servicio de conserjería en la piscina, cócteles artesanales, equipo de snorkel, tablas de paddle y kayaks. Estilo playero chic.”

Recomendado para

  • Vida en la Playa

    • Aprovecha las tumbonas frente al mar del hotel y pasa días relajándote en la playa
  • Relajación total

    • Disfruta de cócteles junto a la piscina o relájate y descansa en el spa
  • Restaurante

    • Elige entre The Wave Kitchen & Bar (el restaurante emblemático) o el Cabana Pool Bar & Grill, ambos sirviendo deliciosos mariscos
  • Admite mascotas

    • Habitaciones designadas como aptas para mascotas, además de golosinas de bienvenida, camas y cuencos para perros pequeños
  • Ciclismo

    • Tome las bicicletas de paseo del hotel y explore la zona durante el día
  • Spa

    • Gama completa de spa que ofrece tratamientos faciales, masajes, tratamientos corporales y paquetes de spa
  • Deportes acuáticos

    • Alquila una moto de agua por una hora o usa las tablas de paddle surf del hotel
  • Habitaciones con balcón/terraza

    • Las habitaciones cuentan con amplios balcones con vistas al océano
  • Área de Vida Silvestre

    • La cercana Laguna del Río Indio alberga delfines
  • Yoga

    • Participa en una de las clases de yoga del resort
  • Paseos maravillosos

    • Pasea por la orilla de la playa
  • Ideal para niños

    • Se aceptan todas las edades
  • Esnórquel

  • Terraza para Disfrutar

  • Lujo

  • Buceo

  • Acceso para personas con discapacidad

  • Kayak

  • Boutique

  • En la playa

Instalaciones

  • Habitaciones

    94 habitaciones en este hotel
  • Restaurante

    Elige entre The Wave Kitchen & Bar (el restaurante emblemático) o el Cabana Pool Bar & Grill, ambos sirviendo deliciosos mariscos
  • Admite mascotas

    Habitaciones designadas como aptas para mascotas, además de golosinas de bienvenida, camas y cuencos para perros pequeños
  • Spa

    Gama completa de spa que ofrece tratamientos faciales, masajes, tratamientos corporales y paquetes de spa
  • Habitaciones con balcón/terraza

    Las habitaciones cuentan con amplios balcones con vistas al océano
  • Bar

    Dos bares, incluyendo un bar junto a la piscina
  • Comedor privado

    Servicio de comida en la habitación disponible
  • Ideal para niños

    Se aceptan todas las edades
  • Wifi

  • Cuidado de Niños

  • Terraza para Disfrutar

  • Cunas disponibles

  • Sala de Reuniones

  • Bicicletas disponibles

  • Piscina

  • Sistema de música en la habitación

  • Televisión por satélite / cable

  • Conserjería

  • Suites

  • Acceso para personas con discapacidad

  • Servicio de habitaciones

Actividades

  • Ciclismo

    • Tome las bicicletas de paseo del hotel y explore la zona durante el día
  • Deportes acuáticos

    • Alquila una moto de agua por una hora o usa las tablas de paddle surf del hotel
  • Área de Vida Silvestre

    • La cercana Laguna del Río Indio alberga delfines
  • Yoga

    • Participa en una de las clases de yoga del resort
  • Paseos maravillosos

    • Pasea por la orilla de la playa
  • Esnórquel

  • Buceo

  • Kayak

Mapa y ubicación

Otras reseñas

COSTA D'ESTE

It’s sometimes said that Vero Beach is to Miami what the Hamptons are to New York, but don’t let that dissuade you — whereas the Hamptons are often just where Manhattan excess spends its summer vacations, Vero Beach remains a sophisticated little beach town, far indeed from the noise of its glammed-up neighbor to the south. And so it’s here, on a quiet stretch of soft white sand, that we find Costa d’Este, a mid-size, maximally tasteful resort owned by Gloria and Emilio Estefan, whose easy-listening music might as well be Vero Beach’s soundtrack.

If there’s sort of a throwback aspect to the appeal of a mellow Florida coast resort, the design is nonetheless perfectly current, complete with playful retro flourishes like Fontainebleau-style porthole windows. Ocean views and balconies, plus rich materials like Egyptian cotton linens and tumbled limestone showers, come standard.

The restaurants and bars have a pleasant, low-key social energy, but the real fun is reserved for the pool. Sitting just above the unspoiled beach, it’s surrounded by oversized rattan loungers and serviced by poolside concierges who are as quick with the fun stuff — mojitos, frozen grapes, spritzes of cool water — as they are with the towels and sunscreen. And when you’ve had enough sun, the spa is a worthy diversion.

It wouldn’t be a resort town without some excellent nearby golf courses (guests of the hotel are given privileged access to several local private clubs), and the shopping is quite good, too, but what really sets the area apart is its trove of natural treasures. The nearby Indian River Lagoon is America’s most ecologically diverse estuary, home to dolphins and manatees among other critters, while Archie Carr National Wildlife Refuge is the country’s most important sea turtle refuge. We coddled humans aren’t the only ones who prefer this stretch of Florida coast unspoiled.

Publicado originalmente por Tablet

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