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A solo 45 minutos en coche del centro de Lisboa, esta tradicional pousada portuguesa ofrece un divertido cambio de escenario de una noche desde la ciudad. La ubicación elevada en la cima de la colina ofrece vistas impresionantes hacia Lisboa y más allá. Con origen en el siglo XV, este antiguo convento está distribuido de manera tradicional y atractiva alrededor de un patio central enclaustrado con naranjos y arbustos. Las habitaciones y los baños sin pretensiones son simples y algo anticuados, necesitando una renovación, pero aun así limpios, ordenados y cómodos. El personal es amable, aunque podría estar más presente. El desayuno se sirve en los soleados claustros, y la cena en el refectorio de abajo, decorado con antigüedades y tapices. Puedes trepar por las almenas del adyacente castillo moro maravillosamente sin las restricciones de las normativas de salud y seguridad, y contemplar el infinito panorama. Baja por el empinado camino para llegar a la tranquila Palmela, o toma un taxi a la cercana Setúbal para disfrutar de delicioso marisco fresco directamente de los barcos pesqueros.
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28 habitaciones en este hotelTerraza para Disfrutar
Vistas impresionantes a Setúbal y más alláInstalaciones para conferencias
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Cena al aire libre
Bar
Estacionamiento
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