A solo dos kilómetros de la costa turca, Kastellorizo se siente muy diferente de la mayoría de las islas griegas. Siendo una de las menos visitadas de las populares Dodecaneso, es una maravillosa tierra de aguas turquesas brillantes, playas de arena y colinas áridas. La fascinante historia de la isla es otro gran atractivo, con antiguas fortalezas, iglesias con cúpulas y coloridos pueblos. Nuestra selección de los mejores lugares para hospedarse en Kastellorizo encarna este patrimonio a la perfección, con habitaciones bellamente decoradas en una casa histórica.
Ocupada sucesivamente por venecianos, turcos, franceses, italianos e ingleses, y luego bombardeada por las fuerzas alemanas durante la Segunda Guerra Mundial, la isla tiene una historia turbulenta y una rica cultura de influencias mixtas. La ciudad más grande de Kastellorizo es un laberinto de casas de techos rojos pintadas de blanco, amarillo, azul pálido y rosa, agrupadas alrededor de una bahía azul salpicada de botes de pesca. Su arquitectura se siente mucho más oriental que la de la mayoría de las islas griegas, y se aprecia mejor en un recorrido guiado o un paseo relajado con un helado.
Aventúrate hasta el arruinado Castello Rosso del siglo XIV, admira la Iglesia Bizantina de San Jorge y explora el maravilloso Museo de Kastellorizo durante el transcurso de tu visita. Al oeste de la ciudad, también encontrarás los restos de una antigua acrópolis. Disfruta del sol en la playa o haz excursiones en barco a impresionantes cuevas marinas, incluida la deslumbrante Gruta Azul. Refréscate con un chapuzón en el mar a solo metros del mejor lugar para hospedarte en Kastellorizo, antes de disfrutar de una copa al atardecer en la terraza.
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Kastellorizo
Un colorido hotel boutique en un rincón menos visitado del Dodecaneso. Las siete habitaciones tienen un estilo único. Las habitaciones del jardín cuentan con camas de plataforma al estilo otomano, mientras que la terraza de la suite está a solo unos pasos del mar. Se sirven desayunos mediterráneos y se pueden organizar cenas. Un refugio tranquilo.
