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Pocos hoteles que pretenden parecerse a un barco podrían lograr el diseño de este hotel dentro del Parque Natural del Cabo Dorado. Las líneas curvas en la parte superior dan paso a una espléndida piscina al aire libre abajo, con filas uniformes de tumbonas blancas. Lo mismo ocurre con el club en la playa de guijarros, con servicio personalizado, por ejemplo toallas, bebidas y excursiones adaptadas a tus necesidades. Para los noctámbulos, el hotel cuenta con su propio club nocturno. Para los madrugadores, disfruten de un partido de tenis en una de las ocho canchas al aire libre seguido de un desayuno saludable en Vitality deli. El spa es sublime, y es poco probable que solo se visite una vez. Tenga en cuenta que este hotel es minimalista, pero ejecutado con maestría.
Relajación total
Escapada Romántica
Paseos maravillosos
Ciclismo
Pista de Tenis
Playa cercana
Lugares de interés cercanos
Área de Vida Silvestre
En una Reserva Natural
Terraza para Disfrutar
Club Infantil
Lujo
Contemporáneo
Spa
Lujo de 5*
Restaurante
Ideal para niños
Gimnasio
Elegante
Habitaciones
248 habitaciones en este hotelPista de Tenis
8 pistas al aire libre y 4 pistas cubiertas dentro del complejoClub Infantil
Terraza para Disfrutar
Seguro
Estacionamiento
Bar
Bicicletas disponibles
Cena al aire libre
Sauna/Baño de Vapor
Masaje
Sala de juegos
Wifi
Ideal para niños
Gimnasio
Jardín
Piscina
Restaurante
Spa
Paseos maravillosos
Ciclismo
Lugares de interés cercanos
Área de Vida Silvestre
The gleaming-white Y-shaped building rises out of the forest like a landlocked cruise ship; light-flooded, airy interiors incorporate flowing beige-golden fabrics, hanging gardens, rich murals, and an ethereal suspended steel sculpture in the six-story lobby.
Publicado originalmente por Conde Nast Traveller
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