Grange-over-Sands es un encantador pueblo costero de la era eduardiana en el borde arenoso de la Bahía de Morecambe, a solo once kilómetros de Lake Windermere en el Distrito de los Lagos. Fue el clima templado, el aire marino revitalizante, las vistas impresionantes, la maravillosa vida silvestre y la proximidad a los encantos del Distrito de los Lagos lo que llevó a la popularidad de Grange-over-Sands como un resort costero a principios de 1900, que son las mismas cosas que la gente ama de Grange-over-Sands hoy en día. Nuestra selección de los mejores lugares para alojarse en Grange-over-Sands — un íntimo B&B y un hotel costero maravillosamente tradicional — ofrecen no solo fabulosas vistas al mar, sino también un ambiente relajante.
La parte del pueblo de Grange-over-Sands consiste en algunas filas de bonitas tiendas que ofrecen un encanto del viejo mundo. Y hay un sorprendente número de muy buenos pubs y restaurantes cercanos, incluyendo el galardonado con estrella Michelin L’Enclume, y Rogan’s Bistro, que está en la ribera del río. El paseo marítimo es un lugar mágico para caminar por la tarde — tiene 1,6 kilómetros de largo y está bordeado de tiendas, jardines e incluso palmeras. Los hermosos jardines costeros de Grange-over-Sands atraen una enorme variedad de aves, y hay varias reservas naturales locales.
Los mejores lugares para alojarse en Grange-over-Sands también son una excelente base para excursionistas y para cualquiera que explore la región. Estás cerca de Cartmel — que el pueblo argumenta es el hogar del pudín de toffee pegajoso — al que se llega por un maravilloso recorrido de pintorescos caminos rurales que pasan entre prados, y hasta el borde de las colinas, comenzando con la colina de Hampsfield de 222 metros.
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Grange-over-Sands (Grange-over-Sands)
Un elegante y discreto B&B con solo tres suites amuebladas con antigüedades, y con hipnotizantes vistas al mar. Un refugio perfecto en un encantador balneario anclado en el tiempo.
Grange-over-Sands
Único y lleno de carácter: hotel victoriano a la antigua, distinguido y elegante. Habitaciones ornamentadas con camas con pesados cortinajes y muebles de estilo antiguo. Jardines bellamente cuidados. Piscina interior, jacuzzi y spa extenso. Restaurante fabuloso. Maravillosamente romántico.