The Plough

Nuestras reseñas

A pesar de una ubicación poco atractiva - en una carretera transitada, a seis kilómetros del pueblo más cercano, cerca de una autopista - este lugar siempre está concurrido. Tiene un menú fascinante y una decoración moderna-rústica atrevida que, en conjunto, crean un ambiente relajado y amigable. El menú es una mezcla de clásicos de pub y platos de bistró más sofisticados, cocinados sin complicaciones pero con confianza y un toque de estilo. El diseño tiene un estilo similar, sencillo pero seguro, que funciona bien en el edificio en su mayoría victoriano (aunque las vigas bajas y las gruesas paredes indican que tiene un núcleo mucho más antiguo). Mesas de madera sin adornos, sillas desparejadas, sofás de cuero y terciopelo se colocan contra paredes de un elegante gris con estufas de leña en chimeneas de piedra. El área de comedor (con el mismo menú que en el bar) añade sillas de flores de color rosa brillante y papeles pintados llamativos. Las seis habitaciones tienen la misma elegancia campestre-contemporánea sin esfuerzo, con paredes de colores suaves, muebles de estilo provenzal francés, cabeceros de latón y gruesas cortinas. Piezas vintage o retro añaden un toque de ingenio mientras que los baños son enormes, todos con bañeras independientes. Aparte de un simple paseo, no hay nada en la puerta, pero es una buena base para explorar el Distrito de los Lagos o los Valles de Yorkshire, y luego volver para una cena memorable.

Helen Pickles